LA BANDERA SANTEÑA
Toda bandera tiene su historia, de hecho su creación está ligada a acontecimientos relevantes que marcan el devenir del sistema social, sea este nación, república o región. El emblema surgió hace milenios cuando se requería de un símbolo que representara al grupo humano, porque entre otros motivos era nula la instrucción pública y el ciudadano necesitaba de un pendón (escudo o insignia) que le indicara la agrupación social a la que pertenecía. Se comprende, en consecuencia, que los escudos y banderas fueran asumidos por el poder militar, político, económico y religioso.
América Latina no fue la excepción y las banderas se ligaron a los movimientos independentistas del Siglo XIX. Las nuevas naciones crearon sus símbolos y los oficializaron luego de un proceso no exento de errores, altibajos y aciertos. En este sentido la enseña tricolor nacional también ha experimentado el perfeccionamiento del emblema patrio, pero siempre sobre la base de la estructura original. Otro tanto acontece con la bandera santeña.
EL SURGIMIENTO DE LA BANDERA SANTEÑA
La bandera de la tierra del Canajagua tiene una historia hermosa. Está ligada a las luchas libertarias de América Latina y del Istmo. Su formato procede del diseño que ideara en 1806 don Francisco de Miranda (1750-1816) (Este caballero fue el que insufló el ánimo que los hispanoamericanos teníamos derecho a la autodeterminación y por ello, a la independencia de España.) , adalid de las luchas libertarias, para que fuera insignia de nuestros países. La idea original evolucionó, en las primeras décadas del Siglo XIX, hasta lograr ser representativa de países como Ecuador, Venezuela y Colombia, (pero después de la bandera santeña). Esta bandera (la santeña), cuando en Colombia, Ecuador y sobre todo Venezuela, se enteraron que existía, ¡QUEDARON TOTALMENTE ASOMBRADOS! ¡Ni ellos tienen eso! Poseen los mismos colores pero invertidos y sus banderas nacieron DESPUÉS de la Bandera Santeña. Es no sólo una bandera histórica custodiada en el Museo de la Nacionalidad, ¡sino un símbolo de la independencia americana por su primer prócer, el General Francisco de Miranda, inspirador del Libertador!.
En el caso santeño, región en la que fructificaron los deseos de liberarse del yugo español, como aconteció con el 10 de noviembre de 1821, en la Villa de Los Santos, y la insurrección tableña del 8 del mismo mes y año, la zona asumió los símbolos en boga para dotarse de una bandera que le fuera representativa. Así surgió el emblema tricolor que aún flamea en la Provincia de Los Santos como portaestandarte del santeñismo.
Fue tan aceptada la bandera, que entre los años 1850 y 1855, en la ya desaparecida Provincia de Azuero, la misma fue izada en la jurisdicción que actualmente comprende las provincias de Los Santos y Herrera, porque ya desde aquellos tiempos las autoridades estaban conscientes del valor que ella representaba.
LA PROVINCIA DE LOS SANTOS YA TIENE SU BANDERA
De lo anterior se colige que la Provincia de Los Santos ya tiene su bandera. Hace algunos años atrás, en consulta que realizaran los ediles de la Provincia de Coclé, sobre los deseos de esa jurisdicción administrativa de tener bandera propia, la Procuraduría de la Administración Pública emitió la siguiente opinión (C-No 144 del 17 de julio de 2003, pág. 3) en la que deja bien claro la oficialización de la tricolor bandera santeña.
Afirma:
“La Provincia de Los Santos cuenta con su bandera provincial desde 1821, bandera oficializada, mediante acto firmado por el Secretario de la Gobernación de aquella época y con el sello de Gobierno y Justicia”.
El documento anterior deja en claro que la región santeña posee una bandera cuya existencia tiene, en el presente año (2015), 194 años de existencia.
UN ERROR QUE HA DE SER SUBSANADO
A lo largo del tiempo se han cometidos graves errores con los símbolos del santeñismo. No pocas veces, animados por buenos motivos, algunos santeños han modificado los mismos con el sano propósito de subsanar lo que ellos consideran una carencia provincial.
El caso de la bandera forma parte de tales errores. Lamentablemente, sin conocer que tan importante es el significado de ésta bandera, se han propuesto otras banderas desconociendo que tenemos una llena de glorias, la que bajo ninguna circunstancia puede ser reemplazada por otra, por la sencilla razón de que está ligada a las luchas de un pueblo que la asumió como emblema de libertad, igualdad y fraternidad.
Hoy el santeñismo reclama respeto a lo que ha sido en más de cuatrocientos años de vida. Por eso, desde el año 2006, un grupo de profesionales plantea el rescate de esta gloriosa bandera que no puede ser tirada al basurero de la historia, por la sencilla razón de que jamás se ha creado ninguna que pueda competir con el significado trascendente que la enseña tricolor encarna.
Tal es la encrucijada histórica en la que nos encontramos. El rescate de la bandera santeña forma parte de la puesta en valor de nuestro proyecto colectivo de vida. En efecto, el santeñismo sólo sobrevivirá el Siglo XXI si los santeños asumimos el papel de respetarnos a nosotros mismos, así como a nuestra cultura e historia regional.
Santeño siéntete orgulloso de tu bandera (la original), tiene un significado muy valioso.