El excepcional legado del doctor José Antonio Price (1890-1951) languideció durante mucho tiempo en el olvido al que ha sido condenado la distorsionada historia panameña. Al igual que ocurrió con otros prominentes afro-panameños, la elitista pluma relatora de nuestra historia consiguió ignorarle. Esta nota pretende rescatar su destacado aporte.
Corría el año de 1913 y nuestro país cumplía apenas una década de fundado. Eran tiempos de profunda convulsión social, donde empezaba a entenderse que el fenómeno migratorio impulsado por la construcción del Canal reconfiguraría para siempre el componente étnico del panameño. Atrapado en dicha vorágine, el afro-descendiente de origen caribeño luchaba por integrarse socialmente al lugar que ya consideraba propio, como su hogar.
Fue dentro de este contexto que José Antonio Price, un humilde hijo de inmigrantes provenientes de Belice, logró concretar una hazaña que pocos panameños, sin importar su estrato social, podría presumir de alcanzar a principios del siglo XX: convertirse en médico cirujano.
Su excepcional proeza no fue producto del azar y requirió enfrentar difíciles obstáculos marcados por el racismo imperante en la época. Para conseguir su objetivo viajó desde Bocas del Toro hacia Kingston, Jamaica, donde culminó sus estudios secundarios. Con tan solo 18 años a cuestas su siguiente paso lo llevaría hacia el sur de los Estados Unidos, donde imperaba una brutal segregación institucionalizada a través del régimen del Jim Crow.
Entre 1908 y 1913 realizó estudios de farmacia y medicina en dos universidades segregadas: Shaw University ubicada en Raleigh, Carolina del Norte y University of West Tenessee College of Medicine and Surgery, donde finalmente se recibió como Medico Cirujano.
El Doctor Price contrajo nupcias en 1915 con Lilian Maud Georget Smith, hija del comerciante francés Victor Georget quien ejerció como Superintendente de la United Fruit Company en Bocas del Toro hasta su fallecimiento en 1908. José Antonio Price vuelve a contraer matrimonio en 1941 con María America Vernaza Boyes, nieta del General Liberal Heliodoro Vernaza, quien combatió en la Guerra de los Mil Días. Juntó a María America procreó tres hijos José Antonio, Juan Antonio y Desiree Antonia.
LA INVESTIGACIÓN
Hasta hace muy poco, era casi nada lo que se conocía sobre la trascendencia histórica de nuestro personaje. Una pequeña reseña incluida en el Libro Azul de Panamá, editado en 1916, era quizás la única pieza documental que daba cuenta de sus logros.
Lo anterior motivó a sus descendientes a contactar al doctor Todd Savitt, profesor de la Universidad de East Carolina y experto en historia de la Medicina Afroamericana. El destacado académico logró ubicar pruebas documentales de los estudios del doctor Price en la Universidad de West Tennessee, identificándolo como uno de sus 284 graduados. Dicha entidad académica, de carácter privado, cerró sus puertas en 1924 a consecuencia del Reporte Flexner, que provocó igualmente la clausura de otra decena de universidades para afroamericanos en el sur de Estados Unidos.
La tradición oral de la familia Price, da cuenta de que un influyente personaje de la época ayudó a financiar los estudios del doctor. Nos referimos al doctor Carlos Antonio Mendoza quien residió en Isla Colón entre 1905 y 1908, algunos años antes de convertirse en presidente de la República.
DE VUELTA AL TRÓPICO.
Hace más de 100 años, el joven galeno arribó a Bocas del Toro, proveniente del Puerto de New Orleans, a bordo del vapor Abangarez propiedad de la United Fruit Company. A su retorno Price fundó la ‘Farmacia Central’ y el Hospital ‘Santa Fe’, establecimientos ubicados entre Avenida Central y Calle Cuarta de Isla Colón.
Una minuciosa búsqueda conducida en las ediciones del diario Star & Herald de la década del veinte arroja múltiples anécdotas de su labor profesional en la provincia. Existe evidencia de que se desempeñó también como médico forense y de cuarentena para el puerto de Almirante, en Bocas del Toro.
La Gaceta Oficial da igualmente cuenta de su nombramiento en 1923 y 1924 como Médico Oficial de la Sección Oriente de la Provincia de Chiriquí y la provincia de Darién por parte del presidente Belisario Porras. En 1929 participa en la formación de la Asociación Médica Nacional. Una foto de Carlos Endara captada durante la reunión constata su presencia, aunque -por motivos aún por esclarecer- su firma fue omitida del acta fundacional.
ACTIVIDAD POLÍTICA
Existe evidencia que demuestra que el doctor Price fue también un prominente político liberal, cercano a Carlos A. Mendoza, Belisario Porras, Francisco Arias Paredes y Ernesto de la Guardia. A partir de 1914 fue electo en varias ocasiones miembro del Consejo Municipal de Bocas del Toro, llegando a ser su presidente en el periodo 1932-1936.
Fue también uno de los Concejales responsables por la construcción del Cementerio de Isla Colón (1920-1922). En una de las vetustas paredes de la necrópolis cuelga aun una placa que lleva su nombre, como único testimonio físico de su labor como funcionario Público.
RESCATE HISTÓRICO
La historia del doctor José Antonio Price merece ser contada. La misma relata la travesía vital de un humilde panameño que en busca de conocimiento y superación, decide enfrentar con éxito las calamidades de un ambiente hostil y degradante marcado por el racismo. Su triunfo debe ser celebrado por todos los panameños como muestra de nuestros mejores valores.
Un proceso investigativo adelantado en Panamá, Belice, Jamaica y Estados Unidos da forma a su historia, la cual es escrita por Ariel Pérez Price, uno de sus nietos, a través del formato de una novela bibliográfica.
La vida del galeno llegó prematuramente a su fin en 1951, producto de un agresivo cáncer. Su tumba originalmente ubicada el cementerio de Isla Colón no ha podido ser ubicada. La misma se presume fue reclamada por el océano durante una tormentosa noche, allá por los años setenta. No permitamos que su ejemplo también desaparezca y divulguemos su inspiradora proeza.