La historia
Cuentan que en los caminos cercanos a los bosques aparece una espantosa procesión y a la cabeza van cuatro almas en pena que cargan sobre sus hombros un guando. ¿Y esto qué es? El guando es una especie de camilla mortuoria que está hecha con varas de madera y tablas, y sobre esta se trasladan a los muertos en ataúd y con una sábana blanca encima hasta el cementerio de los pueblos.
Según la leyenda,hace varias décadas, vivía un hombre egoísta y malhumorado que odiaba compartir con las gente y jamás se preocupaba por ayudar a los demás. Cuando alguna persona del pueblo moría, este amargado hombre jamás acudía a los funerales, y mucho menos se prestaba para ayudar con el guando del muerto. Incluso, en medio de sus rabietas, en alguna ocasión pidió a sus conocidos que cuando muriera botarán su cuerpo a un río porque no quería deberle favores a nadie. Cuando la muerte tocó a su puerta, los vecinos se compadecieron y construyeron un guando para su traslado. Iniciaron la procesión en medio de una absurda soledad, pero tuvieron que hacer varios relevos porque el hombre era muy pesado. Para llegar al pueblo se debía cruzar un río por un puente de madera y cuando iban en la mitad, inexplicablemente el cuerpo aumentó su peso y las tablas del puente se partieron. El cuerpo sin vida de este hombre cayó al agua con su guando y se perdió para siempre.
Apariciones
Desde entonces, este hombre fue apodado ‘El Guando’ y aparece en vísperas de alguna muerte con sus cuatro cargadores y una procesión que lleva pequeñas velas encendidas. Quienes lo han visto aseguran que los que cargan a este hombre usan trajes negros que cubren todo el cuerpo, e incluso se dice que no tienen piel, sino que son simples cadáveres. Además, quienes van en la procesión susurran rezos y hablan entre ellos tratando de sobrellevar el peso que cargan sobre sus hombros.
‘El Guando’ se les aparece a los trasnochadores, a los borrachos, a los avaros y crueles; a los mezquinos, a los enemigos de hacer el bien y a quienes no se detienen ante nada con tal de hacer dinero. Cuando se está cerca de esta entidad el ambiente se torna oscuro y muy frío, además, la persona puede escuchar el sufrimiento de las almas en pena y caer desmayado por el susto.