La leyenda del Altar de Oro
El Altar de Oro está envuelto en la leyenda. La tradición dice que este altar fue de las pocas cosas que se salvaron del ataque del pirata inglés Henry Morgan en 1671, cuando saqueó e incendió la ciudad, pero los estudios sobre el estilo del retablo lo sitúan en el siglo XVIII y se pone en duda esta versión.
Según cuenta la leyenda, cuando el pirata inglés Henry Morgan atacó e incendió la Ciudad de Panamá -hoy conocida como Panamá Viejo- la orden de San José estaba levantando su iglesia de piedra en las afueras, muy cerca del Puente del Rey, la iglesia ya exhibía su altar mayor, la mayor joya dorada de aquel entonces.
Se cuenta que en el momento del saqueo, estaba a cargo de la iglesia un fraile oriundo de la Villa de Los Santos llamado Juan, alertado éste, cubrió el altar de oro con una mezcla de Albayalde (oxido de plata), para darle una apariencia de inconcluso por lo que se veía ennegrecido. Cuando Morgan llegó a la iglesia se quejó de la pobreza de la orden y el Fray Juan le pidió una limosna de mil ducados para terminar el Altar. Dicen las historias que Morgan luego de mucho reír exclamó: “Este lego es más pirata que yo” y mandó le entregasen el dinero pedido.
Si estan de paseo por el Casco, no olviden visitar este ejemplo de una de las riquesas históricas de esta pintorezca área de la ciudad.
Text Source: visitpanama
Foto por: alexander alexis