Diógenes De la Rosa
Historia, Política, Periodismo, Panamá
Diógenes De la Rosa Robles (1904-1998). Periodista, historiador, ensayista, político y diplomático panameño. Miembro de número de la Academia Panameña de la Lengua y de la Academia Panameña de la Historia. Uno de los más importantes teóricos de la nacionalidad panameña, junto a Justo Arosemena, Eusebio A. Morales y Ricaurte Soler, entre otros.
Diógenes De la Rosa Robles fue hijo de Mauricia Robles y de Lucio De la Rosa, obrero de origen mexicano que se desempeñaba como jornalero en los muelles del puerto de Balboa y de La Boca, en la entrada sur del Canal de Panamá -en la antigua Zona del Canal. Nació en la ciudad de Panamá el 26 de enero de 1904, a poco menos de tres meses de la separación de Panamá de Colombia (llevada a efecto el 3 de noviembre de 1903), y a escasas semanas de la firma del Tratado Hay-Bunau-Varilla, de 18 de noviembre de 1903. Mediante este tratado, Estados Unidos construiría y administraría el Canal de Panamá. Para ello, expropió el recurso geográfico que constituía la vía interoceánica, junto con grandes extensiones de tierras y algunas de las fuentes de agua más valiosas de Panamá; de tal modo, hipotecó la soberanía nacional por casi cien años.
Diógenes De la Rosa realizó estudios primarios en la Escuela Anexa al Instituto Nacional. Su temprana vinculación a proyectos sociales y políticos de sentido popular y nacional fue condicionada -y aun determinada- por la formación que brindaba el Instituto Nacional, gracias al influjo del pensamiento avanzado de maestros como José Dolores Moscote, Octavio Méndez Pereira, José Daniel Crespo, Cristóbal Rodríguez, Jeptha B. Duncan, José Pezet, Manuel Patiño y otros. En no menor grado, recibió la influencia del contexto económico, social y político que caracterizó las frágiles primeras décadas de la República, signadas por la construcción del canal interoceánico, el intervencionismo norteamericano y la constante ocupación militar de las ciudades de Panamá y Colón y de otras porciones del territorio, con el consiguiente menoscabo de funciones esenciales del Estado. Asimismo, la situación latinoamericana e internacional, marcada por la Revolución Mexicana, la Revolución Bolchevique, la Reforma Universitaria de Córdoba, la Primera Guerra Mundial y el arribo a Panamá de exiliados provenientes de diversas latitudes también prepararon su desarrollo político. Por otra parte, el autoestudio sistemático, el contacto con prestantes personalidades del ámbito nacional y latinoamericano y la práctica socio-cultural y política lo acercaron a las ideas sociales más avanzadas, y en particular al marxismo.
Diógenes De la Rosa se graduó como Maestro de Enseñanza Primaria en el Instituto Nacional, el 2 de febrero de 1921.
En 1920, cuando apenas contaba con dieciséis años de edad, formó parte del Grupo Comunista de Panamá, organización fundada e inspirada ideológicamente por José María Blázquez De Pedro, anarcosindicalista español asilado en Panamá, quien sería expulsado del país en 1925, en el marco de la represión que siguió a la ocupación militar norteamericana enfilada contra la dirigencia del Movimiento Inquilinario. A partir de entonces, los empeños de Diógenes De la Rosa se dirigieron a la organización de los sectores populares y de la clase trabajadora en asociaciones culturales y políticas como la Federación Obrera de Panamá, el Sindicato General de Trabajadores, la Liga de Inquilinos y Subsistencias, la primera Federación de Estudiantes (1922-1925), el Partido Laborista, el Partido Socialista (junto a Demetrio Porras y José Brower), el Grupo Renovación Social (con Carlos Sucre Calvo, Antonio J. Sucre, Felipe Juan Escobar y José Ma. Lasso de la Vega) y el Círculo de Jóvenes Escritores “Demetrio Herrera Sevillano”, al lado de Bonifacio Pereira. En 1933, con Rodrigo Miró, Luis Restrepo, Octavio Henríquez y otros, participó en la fundación del Partido Obrero Marxista Leninista, cuyo órgano de divulgación fue el periódico Organización, que él dirigió.
De la Rosa discrepó firme y abiertamente de la línea impuesta por José Stalin a la Internacional Comunista tras la muerte de Lenin, y se adhirió a las ideas de León Trotski.
En 1936, al estallar la Guerra Civil Española, se creó en Panamá el Comité de Defensa de la República Española, del que formaron parte Elida C. de Crespo, Rodrigo Miró y Víctor Cruz Urrutia. Diógenes De la Rosa dirigió el órgano de divulgación del Comité, que recibió el nombre de España Libre.
Su tesón contribuyó a abrir cauce a luchas populares y nacionales de especial proyección histórica, como el Movimiento Inquilinario de 1925 y 1931-1932, el rechazo a la firma del Tratado sobre el Canal Alfaro-Kellogs, en 1926; la creación de la Universidad Nacional, en 1935, y el reconocimiento de su autonomía; el movimiento de 1945-1946 por una Asamblea Constituyente. De manera destacada, dedicó ingentes esfuerzos a la lucha por la abrogación del tratado sobre el Canal de 1903.
De la Rosa y José A. Brower ostentaron la representación del Partido Socialista ante la Asamblea Nacional Constituyente de 1945, que elaboró la Constitución Política de 1946, cuyo articulado recoge algunas de sus propuestas de mayor sentido social.
Diógenes De la Rosa comenzó a incursionar en el periodismo a la temprana edad de catorce años, en la Revista Minerva. Más adelante colaboró en el semanario El Nuevo Tiempo, fundado por José Dolores Moscote; en los diarios La Nación (1921) y El Nacional (1922-1923), dirigido por Domingo H. Turner; en El Tiempo, fundado en 1919 por Guillermo Andreve y dirigido por Jeptha B. Duncan, y en La Estrella de Panamá (1925). En ese ejercicio adquirió maestría, particularmente en el género ensayístico.
Fundó y dirigió un número plural de diarios: El Hombre Libre (1924), El Inquilino (1925), El Laborista (1926), El Grito del Pueblo (1928), El Nuevo Liberal (1931-1932), El Campesino (1934), España Libre (1936-1937), Frente Popular (1937), Guion (1942), Acción Socialista (1944) y El Socialista (1945-1946). Fue también colaborador -o fundador- de diversas revistas panameñas y extranjeras: Letras de Panamá; Cuadernos de Cultura; Comentarios; Repertorio Americano -que dirigió en Costa Rica Joaquín García Monge- y Trabajo, dirigida por el venezolano Rómulo Betancourt, a la sazón exiliado en Costa Rica.
De la Rosa fue concejal del Distrito Capital en el período 1932-1936; representante de los inquilinos ante la Junta de Inquilinato (entidad tripartita creada en 1932 en el contexto de las luchas inquilinarias que confluyeron en la Ley de Inquilinato, redactada por De la Rosa y Domingo H. Turner durante el gobierno de Harmodio Arias); secretario del Ayuntamiento Provincial de Panamá en el período 1942-1943 -cuando Adolfo De La Guardia asumió el poder, luego del golpe de Estado contra el gobierno de Arnulfo Arias-; miembro de la Asamblea Constituyente en 1945, y Diputado Nacional en el período 1946-1948; secretario de la Junta de Estudios de los Problemas Nacionales, entre 1944 y 1945; embajador de Panamá ante la República de Venezuela, en 1959; miembro del Equipo Negociador de los Proyectos de Tratados sobre el Canal, en 1967, y miembro del Equipo Negociador de las Tratados Torrijos-Carter de 1977, el cual sentó las bases del programa gradual de descolonización y de reversión del Canal, sus tierras, aguas, bienes e infraestructuras, que culminó el 31 de diciembre de 1999.
En 1997, se le confirió el Premio Universidad de Panamá.
En rigor, a lo largo de más de siete décadas del siglo XX no hubo ningún acontecimiento relevante en el fatigoso desenvolvimiento de la República de Panamá en el cual Diógenes De la Rosa no hubiera sido protagonista sobresaliente. Al fallecer, el 19 de julio de 1998, poco antes de la salida del último soldado norteamericano del territorio nacional panameño (el 31 de diciembre de 1999, en cumplimiento del Tratado Torrijos-Carter), dejó a su país un legado de servicio civil.